La pasta se obtiene por desecación de una masa no fermentada, confeccionada con harinas, sémolas finas o semolinas, procedentes de trigo duro o recio (tritícum durum) o trigo candeal (tritícum vulgare) o sus mezclas, agua potable y sal.
Alimento natural y muy completo, que no exige manipulaciones ni aderezos culinarios complicados y cuyas propiedades a tener en cuenta son:
- Fibra, nos ayuda a la digestión y da sensación de saciedad.
- Minerales, hierro, niacina y ácido fólico.
- La pasta es baja en grasas.
- Mantiene el nivel de glucemia (cantidad de azúcar en sangre) y nos favorece el correcto funcionamiento del sistema gastrointestinal.
- Los carbohidratos que contiene la pasta, controlan el colesterol y los triglicéridos, además son imprescindibles para nuestro cerebro, ayudándonos a prevenir el Alzheimer.
Disponemos pasta de diferentes tipos y formas, procedente de cereales con y sin gluten, como puede ser:
Trigo Blanco, Trigo Integral, Espelta, Arroz, Maíz, Trigo sarraceno, Trigo con verduras (vegetal) y Trigo con tinta de sepia.
La pasta es un alimento muy a tener en cuenta en nuestra dieta. No nos aporta colesterol y casi no nos aporta grasas, con lo cual podemos afirmar que la pasta no engorda y que podemos incluirla en una dieta de adelgazamiento. La pasta es una gran fuente de energía que generalmente agrada a todos y que acepta multitud de recetas y combinaciones.